Musar (III)

Si encuentras a una persona que, habiendo bebido a sorbos de las fuentes de la sabiduría, ya cree que es sabia, puedes concluir de su arrogancia que no ha bebido de la fuente correcta, o no lo ha hecho de la manera correcta (Rabí Samson Rafael Hirsch).

Nunca te conformes respecto a tu crecimiento espiritual; busca constantemente aumentar tu crecimiento. “El hombre fue creado para trabajar con esfuerzo.” (Iyob 5:5)

Trata al menos una vez por día de sentir la alegría de estar vivo. Aprecia el don de la vida. Todos los que ya han fallecido no podrán continuar superándose, tú en cambio sigues vivo y podrás proseguir creciendo espiritualmente. (Jinuj B’edun Hahergeshim, pág. 330).

Un esclavo es alguien que trabaja para otros pero no disfruta de los frutos de su labor. Uno que trabaja solamente por bienes mundanos finalmente deja el producto de sus esfuerzos a otros, y por lo tanto ha llevado una vida de esclavitud. Una persona que logra alcanzar el mundo eterno es realmente una persona libre (Rabí Eliahu Dessler).

¿Por qué Adám fue creado en el día sexto, después de todas las demás criaturas? De tal forma que si una persona se vuelve arrogante, se le recuerde que hasta los insectos lo precedieron en el orden de la Creación. (Talmud Sanhedrin 38)


Del Shamaim (de los cielos) ayudan al que quiere ir por el buen camino. Por eso debes saber que si te empeñas en encontrar la verdad y estás al tanto de que este es el único camino, nada ni nadie podrá privarte de ser mejor. De lo único que depende es de tu voluntad… (Revista Or Torá, Rab Rafael Freue).


Toda vez que ayudes a otra persona de cualquier manera, deberás sentir placer y experimentar regocijo porque estarás cumpliendo con el mandamiento: “Ama a tu prójimo”. Existen un sinnúmero de conductas que están involucrados en este principio. (Yesod Veshoresh Haavodah; tzavaah, Nº 45).

No hagas del ser rico tu principal meta en la vida, y no pienses que por su propia inteligencia, sin la bendición Divina puedes adquirir o proteger tus posesiones” (Rabí Samson Rafael Hirsch).


Una persona es juzgada de acuerdo a la manera en que se relaciona con las otras. Si tú no puedes dejar de pasar por alto las infracciones menores que los otros te han hecho, ¿cómo puedes esperar que Di-s perdone las infracciones mayores que tú has cometido ante Él.

La riqueza es como la sal: agrega sabor a la comida, pero quien come solamente sal, está siempre sediento. (Rabi Meir Bunim de Psishja)

No desprecies a hombre alguno y no consideres nada como imposible. Porque no hay hombre que no tenga su hora, y nada que no tenga su lugar. (Pirké Abot 4:3)

"Aquel que es bondadoso con el pobre está dándoLe un préstamo a D'os" (Mishlé -Proverbios- 19:17).

Escuchar no es solamente permanecer callado; es dedicar tus oídos, ojos, mente y corazón a la persona que te está hablando. Debes prestar atención cuando otros te hablan. No interrumpas la conversación hasta que tu interlocutor haya terminado de hablar. “El que responde antes de oír es un necio”. (Mishlé 18:13)

No hagas del ser rico tu principal meta en la vida, y no pienses que por tu propia inteligencia y sin la bendición Divina puedes adquirir o proteger tus posesiones” (Rabí Samson Rafael Hirsch).

La felicidad y la riqueza no son sinónimas. La riqueza por sí misma no puede asegurar la felicidad. Por el contrario, mucha gente que carece de riquezas logra vivir una existencia muy feliz. (Jafetz Jaim)

Una virtud que debes perseguir es la honestidad. Hay personas que cometen fraudes y piensan que, mientras nadie lo advierta, están libres de culpa. Olvidan que D-os está siempre observando. Una de las bases en las que el mundo se sostiene es la verdad. (Pirké Abot 1:18)


No temas reconocer tus faltas; eso no disminuirá el valor de tu persona. No consideres que reconocer tus faltas es una debilidad; es una expresión de honestidad intelectual. No aceptar las cosas inevitables es la principal fuente de frustración e infelicidad. Sé honesto en lo que quieras decir y exprésalo en forma auténtica y sincera.