Una vez un jasid le pregunto al Rebe Elimelej lo siguiente, en relación a la famosa declaración de nuestros sabios: "¿Cómo es posible bendecir a D-os por las malas noticias con el mismo fervor que en las buenas noticias?"
"Vaya a la sala de estudio" respondió el Rebe, "y pregúntele a mi hermano, el Reb Zusia".
Cuando el jasid puso sus ojos en el Reb Zusia, pudo fácilmente imaginar el sufrimiento que este hombre debió haber experimentado en su vida. El dolor de las enfermedades y la pobreza fueron grabados en su cara. Entonces el jasid procedió a preguntar: "¿Cómo es posible bendecir a D-os por las malas noticias con el mismo fervor que en las buenas noticias?"
Reb Zusia respondió: "¿Por qué me preguntas a mi? ¿Cómo puedo saber la respuesta? ¡Nada malo me ha ocurrido a mi!"
El sentido detrás de la historia es que el efecto de los acontecimientos depende enteramente de la perspectiva de uno. Reb Zusia se consideraba así mismo tan agradecido por cada momento de la vida, que cualquier desgracia era insignificante desde su punto de vista.
Esto me recuerda una broma acerca de una señora que constantemente se quejaba de todo, incluyendo a su nuera que frívolamente se gastaba el dinero que su hijo ganaba a duras penas. "¡Él tiene que llevarle a ella el desayuno a la cama y llevarla a comer afuera todo el tiempo!" Sin embargo, por otro lado, esta mujer llenaba de elogios a su "maravilloso yerno", ¡que le llevaba a su hija el desayuno a la cama y la llevaba a comer afuera!
Es todo una cuestión de perspectiva.
¿Dolor o Placer?
Cuando se le pregunta a la gente si la humanidad esta experimentando más dolor o placer en un momento dado, la mayoría contestara dolor. A pesar de que, objetivamente hay infinitamente mas placer, tal como que haya suficiente para comer, una cama cómoda, la luz del sol – sin mencionar ojos que ven y piernas que se mueven – la mayoría de la gente toma estas cosas por sentado. Tenemos una tendencia a enfocarnos en el dolor – por ejemplo, "¡Tengo un dolor de cabeza!" (¡Que de alguna manera desaparece mágicamente cuando es acompañado por un dolor de muelas!)
Alguna vez han estado en una visita guiada donde una persona esta constantemente quejándose: "Tengo hambre, estoy sediento, estoy cansado, tengo frió..." ¡en lugar de concentrarse en los sitios interesantes (el placer), él se concentra en el dolor!
Si queremos placer en este mundo (¡¿y quién no?!), tenemos que aprender como enfocarnos en lo bueno. Esta escrito en Pirkei Avot, "¿Quién es una persona rica? Uno que esta feliz con lo que tiene". Si quieres lo que tienes, siempre tendrás lo que quieres. No obstante, si deseas lo que no tienes, ¡nunca tendrás lo que deseas! Pasaras tu vida entera deseando lo que tienen otros.
100 Bendiciones Por Día
El pueblo judío tiene una herramienta que nos ayuda a concentrarnos constantemente en los placeres que nos rodean: recitar 100 bendiciones cada día. Recordamos 100 veces al día que
"Vaya a la sala de estudio" respondió el Rebe, "y pregúntele a mi hermano, el Reb Zusia".
Cuando el jasid puso sus ojos en el Reb Zusia, pudo fácilmente imaginar el sufrimiento que este hombre debió haber experimentado en su vida. El dolor de las enfermedades y la pobreza fueron grabados en su cara. Entonces el jasid procedió a preguntar: "¿Cómo es posible bendecir a D-os por las malas noticias con el mismo fervor que en las buenas noticias?"
Reb Zusia respondió: "¿Por qué me preguntas a mi? ¿Cómo puedo saber la respuesta? ¡Nada malo me ha ocurrido a mi!"
El sentido detrás de la historia es que el efecto de los acontecimientos depende enteramente de la perspectiva de uno. Reb Zusia se consideraba así mismo tan agradecido por cada momento de la vida, que cualquier desgracia era insignificante desde su punto de vista.
Esto me recuerda una broma acerca de una señora que constantemente se quejaba de todo, incluyendo a su nuera que frívolamente se gastaba el dinero que su hijo ganaba a duras penas. "¡Él tiene que llevarle a ella el desayuno a la cama y llevarla a comer afuera todo el tiempo!" Sin embargo, por otro lado, esta mujer llenaba de elogios a su "maravilloso yerno", ¡que le llevaba a su hija el desayuno a la cama y la llevaba a comer afuera!
Es todo una cuestión de perspectiva.
¿Dolor o Placer?
Cuando se le pregunta a la gente si la humanidad esta experimentando más dolor o placer en un momento dado, la mayoría contestara dolor. A pesar de que, objetivamente hay infinitamente mas placer, tal como que haya suficiente para comer, una cama cómoda, la luz del sol – sin mencionar ojos que ven y piernas que se mueven – la mayoría de la gente toma estas cosas por sentado. Tenemos una tendencia a enfocarnos en el dolor – por ejemplo, "¡Tengo un dolor de cabeza!" (¡Que de alguna manera desaparece mágicamente cuando es acompañado por un dolor de muelas!)
Alguna vez han estado en una visita guiada donde una persona esta constantemente quejándose: "Tengo hambre, estoy sediento, estoy cansado, tengo frió..." ¡en lugar de concentrarse en los sitios interesantes (el placer), él se concentra en el dolor!
Si queremos placer en este mundo (¡¿y quién no?!), tenemos que aprender como enfocarnos en lo bueno. Esta escrito en Pirkei Avot, "¿Quién es una persona rica? Uno que esta feliz con lo que tiene". Si quieres lo que tienes, siempre tendrás lo que quieres. No obstante, si deseas lo que no tienes, ¡nunca tendrás lo que deseas! Pasaras tu vida entera deseando lo que tienen otros.
100 Bendiciones Por Día
El pueblo judío tiene una herramienta que nos ayuda a concentrarnos constantemente en los placeres que nos rodean: recitar 100 bendiciones cada día. Recordamos 100 veces al día que
D-os es la fuente de todos nuestros placeres, tanto físicos como espirituales.
El Kuzari, un libro clásico de la filosofía judía que contiene un diálogo entre un rey y un sabio judío, y esta basado en una historia real, registra la siguiente conversación:
"Lo que añade placer al placer es recitar una bendición sobre los alimentos antes de comer", asegura el sabio. En otras palabras, ¡la bendición hace que la comida sepa mejor!
Al rey le resulto difícil interiorizar ese concepto, por lo que el sabio le dio una analogía: "si una vaca esta comiendo hierba y un bebe esta bebiendo de un biberón, ¿quién goza mas?" Probablemente el bebé, pero un experto disfrutando una comida gourmet esta obviamente en otro nivel. La pregunta es cuán involucradas están nuestras mentes en el hecho.
Veamos un ejemplo en contraste. Alguien muy borracho puede comer la mejor comida y beber las mejores bebidas mientras escucha la mejor música – y sin embargo, no goza en absoluto. Esto es así a pesar de que sus papilas gustativas y sus oídos están funcionando perfectamente, pero dado que su mente se esta perdiendo del evento, el no esta experimentando el placer. Solo concentrándonos con nuestras mentes, y reconociendo que todos los placeres vienen de Dios, puede cada gusto y olor, cada noche y cada mañana, proporcionar el máximo placer.
Apreciando Regalos
En el judaísmo, las bendiciones de la mañana se manifiestan todas en forma negativa. Damos las gracias a D-os por dar la vista al ciego, enderezar al encorvado, vestir al desnudo, liberar al prisionero, etc. ¿Por qué no se refiere a estos mismos fenómenos de manera positiva – es decir, que me ha hecho libre, que me da la vista, etc.?
Y por cierto, ¿cuándo fue la última vez que escuchaste que la vista de una persona ciega ha sido restablecida? ¡Un evento muy raro para ser mencionado todas las mañanas por millones de judíos!
La respuesta es que los sabios querían que apreciemos los dones de la vista, la libertad, etc., contrastándolos con una situación de privación. Imaginen que un médico logra hacer que una persona ciega vea o que una persona sorda escuche, ¡cuan agradecidos estarán ellos por toda su vida! Así también nosotros, le debemos gratitud a nuestro creador todos los días.
Hay una canción que dice la siguiente frase, "Cada mañana abro todos mis regalos, siempre supe que estaban allí, pero nunca supe para qué eran" Un judío despierta en la mañana y empieza a apreciar todos los dones que se la han concedido.
Enfocarnos en el placer en lugar del dolor es una herramienta poderosa que puede cambiar la actitud de uno ante la vida en general. Las personas que cometen suicidio se concentran exclusivamente en el dolor. Si puedes tener éxito en hacer que aprecien sus placeres, puedes tener éxito en prevenir un suicidio.
D-os y los Padres
En los días de la Unión Soviética, se les enseñaba ateísmo a los niños a una edad muy temprana. "Oremos a D-os por un caramelo", la maestra les decía. Al no surgir los caramelos, ella podía concluir, "La oración no funciona. Así que ahora pídanle caramelos a la maestra".
En ese momento, la maestra distribuía caramelos para toda la clase exclamando: "D-os no tiene lugar en sus vidas. ¡Pero el Socialismo lo tiene!"
Por supuesto, los niños no eran tan sofisticados como para preguntar, "¿De donde provienen los caramelos?" a lo que ella les hubiera respondido, "la fruta crece de los árboles y el azúcar de la tierra".
"Ah, ¡¿quieres decir de D-os?!"
Una de las mitzvot mas importantes (que inclusive es uno de los diez mandamientos), se basa en la gratitud: "Honra a tus padres." Incluso si uno tiene malos padres, al menos ellos lo trajeron al mundo, cambiaron sus pañales, le compraron comida y juguetes, y lo enviaron a la escuela, así también se quedaron con él cuando estaba enfermo y lo llevaron al médico. Si no se puede sentir gratitud hacia los padres, ¿Cómo es posible sentir gratitud hacia D-os que nos da la vida y todo lo que contiene? Servir a D-os se basa en la gratitud.
Algunas Bendiciones Básicas
1.Consumo de alimentos y bebidas: hay bendiciones específicas para el pan, productos de cereales, vino, frutas y vegetales. Hay también una bendición general, "el hace todo con su palabra", que es recitada por los alimentos que no están en las categorías anteriores (por ejemplo, leche, carne, pescado, etc.) Aunque alabar a D-os diciendo que el hizo "todo" parecería ser una mayor alabanza, tiene prioridad la bendición más especifica, ya que se enfoca más claramente en la forma en que D-os nos da ese placer.
El Kuzari, un libro clásico de la filosofía judía que contiene un diálogo entre un rey y un sabio judío, y esta basado en una historia real, registra la siguiente conversación:
"Lo que añade placer al placer es recitar una bendición sobre los alimentos antes de comer", asegura el sabio. En otras palabras, ¡la bendición hace que la comida sepa mejor!
Al rey le resulto difícil interiorizar ese concepto, por lo que el sabio le dio una analogía: "si una vaca esta comiendo hierba y un bebe esta bebiendo de un biberón, ¿quién goza mas?" Probablemente el bebé, pero un experto disfrutando una comida gourmet esta obviamente en otro nivel. La pregunta es cuán involucradas están nuestras mentes en el hecho.
Veamos un ejemplo en contraste. Alguien muy borracho puede comer la mejor comida y beber las mejores bebidas mientras escucha la mejor música – y sin embargo, no goza en absoluto. Esto es así a pesar de que sus papilas gustativas y sus oídos están funcionando perfectamente, pero dado que su mente se esta perdiendo del evento, el no esta experimentando el placer. Solo concentrándonos con nuestras mentes, y reconociendo que todos los placeres vienen de Dios, puede cada gusto y olor, cada noche y cada mañana, proporcionar el máximo placer.
Apreciando Regalos
En el judaísmo, las bendiciones de la mañana se manifiestan todas en forma negativa. Damos las gracias a D-os por dar la vista al ciego, enderezar al encorvado, vestir al desnudo, liberar al prisionero, etc. ¿Por qué no se refiere a estos mismos fenómenos de manera positiva – es decir, que me ha hecho libre, que me da la vista, etc.?
Y por cierto, ¿cuándo fue la última vez que escuchaste que la vista de una persona ciega ha sido restablecida? ¡Un evento muy raro para ser mencionado todas las mañanas por millones de judíos!
La respuesta es que los sabios querían que apreciemos los dones de la vista, la libertad, etc., contrastándolos con una situación de privación. Imaginen que un médico logra hacer que una persona ciega vea o que una persona sorda escuche, ¡cuan agradecidos estarán ellos por toda su vida! Así también nosotros, le debemos gratitud a nuestro creador todos los días.
Hay una canción que dice la siguiente frase, "Cada mañana abro todos mis regalos, siempre supe que estaban allí, pero nunca supe para qué eran" Un judío despierta en la mañana y empieza a apreciar todos los dones que se la han concedido.
Enfocarnos en el placer en lugar del dolor es una herramienta poderosa que puede cambiar la actitud de uno ante la vida en general. Las personas que cometen suicidio se concentran exclusivamente en el dolor. Si puedes tener éxito en hacer que aprecien sus placeres, puedes tener éxito en prevenir un suicidio.
D-os y los Padres
En los días de la Unión Soviética, se les enseñaba ateísmo a los niños a una edad muy temprana. "Oremos a D-os por un caramelo", la maestra les decía. Al no surgir los caramelos, ella podía concluir, "La oración no funciona. Así que ahora pídanle caramelos a la maestra".
En ese momento, la maestra distribuía caramelos para toda la clase exclamando: "D-os no tiene lugar en sus vidas. ¡Pero el Socialismo lo tiene!"
Por supuesto, los niños no eran tan sofisticados como para preguntar, "¿De donde provienen los caramelos?" a lo que ella les hubiera respondido, "la fruta crece de los árboles y el azúcar de la tierra".
"Ah, ¡¿quieres decir de D-os?!"
Una de las mitzvot mas importantes (que inclusive es uno de los diez mandamientos), se basa en la gratitud: "Honra a tus padres." Incluso si uno tiene malos padres, al menos ellos lo trajeron al mundo, cambiaron sus pañales, le compraron comida y juguetes, y lo enviaron a la escuela, así también se quedaron con él cuando estaba enfermo y lo llevaron al médico. Si no se puede sentir gratitud hacia los padres, ¿Cómo es posible sentir gratitud hacia D-os que nos da la vida y todo lo que contiene? Servir a D-os se basa en la gratitud.
Algunas Bendiciones Básicas
1.Consumo de alimentos y bebidas: hay bendiciones específicas para el pan, productos de cereales, vino, frutas y vegetales. Hay también una bendición general, "el hace todo con su palabra", que es recitada por los alimentos que no están en las categorías anteriores (por ejemplo, leche, carne, pescado, etc.) Aunque alabar a D-os diciendo que el hizo "todo" parecería ser una mayor alabanza, tiene prioridad la bendición más especifica, ya que se enfoca más claramente en la forma en que D-os nos da ese placer.
2.Olor, Vista y Audición: Oliendo especias, viendo un rayo o un arco iris, oyendo un trueno y buenas noticias, todos estos momentos requieren bendiciones. Esto mejora nuestra percepción de las experiencias que constantemente disfrutamos. Un ejemplo: al ver un árbol frutal florecer en la primavera, decimos: "Bendito sea D-os que no falta nada en Su mundo, y ha creado bellas creaciones y hermosos árboles, para que las personas disfruten"
3.Necesidades Físicas: Cada vez que vamos el baño recitamos una bendición agradeciendo al Todopoderoso por las maravillas del cuerpo humano y la sabiduría que demuestra. "Quién ha creado al hombre con sabiduría, con aberturas y cavidades, es revelado y sabido ante tu trono celestial, que si cualquier parte del cuerpo funcionara mal (las partes abiertas se cerraran o vise versa), seria imposible para nosotros existir y pararnos ante ti, incluso durante un corto tiempo. Tu curas la carne y realizas maravillas"
4.La Vida Misma: Cuando uno come una fruta de temporada por primera vez, o realiza una mitzvá por primera vez en el año, se da las gracias al todopoderoso por un año más de vida. Esta es la bendición de She'je'ianu.: "Quien nos ha mantenido con vida y nos permite existir para llegar a esta temporada". Piensa en todas las personas que comieron duraznos y ciruelas y encendieron la menorá el año pasado, que ya no están con nosotros...
Las bendiciones son una herramienta que nos permite apreciar todos los regalos de la vida y tener gratitud hacia nuestro creador. Concentrarnos en lo que tenemos y no en lo que nos falta, es el ingrediente fundamental para una vida feliz. ¡Le Jaim!
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